Cuando se rompe un huevo en un cuenco, la yema se mezcla con un huevo blanco. Algunas recetas solo requieren yemas o huevos blancos. Así que aquí hay un truco sobre cómo separar estos dos:
- Toma una botella de plástico
- Aprieta la botella un poco.
- Colócalo sobre la yema y suelta.
- La yema amarilla será absorbida en su botella ahora.
- Deshágase de la yema ahora, deséchela o úsela de otra manera.