Un pequeño sabio recorre un largo camino. Si cosechas más de lo que puedes usar, considera colgar las ramas adicionales para secarlas. Cuando las hojas se hayan secado, cepíllalas o retíralas con cuidado de las ramas sobre una superficie limpia y recógelas para guardarlas en un frasco bien tapado, en un armario frío y seco.
Usa el sabio a menudo y liberalmente:
- Con carnes asadas y aves de corral, y con algunos tipos de mariscos
- En salchicha o pan de carne
- En el relleno
- En salsas
- En salsas o como saborizante para verduras
- En ensaladas