Yo diría que la respuesta es la piel crujiente, sin grasa, carne húmeda (con sabor a grasa de pato derretida) y una sabrosa combinación de maderas .
Para los no iniciados, el siguiente video brinda una breve descripción de cómo se prepara el pato Pekín. Cuando se prepara correctamente, se puede comparar con un orgasmo en la boca, un sabor fuera de este mundo que es difícil de describir con palabras.
Si nunca lo has probado, te estás perdiendo de una de las grandes delicias culinarias del mundo.
Todavía tengo que aceptar el desafío de tratar de hacer esto en casa. Parece extremadamente difícil para el cocinero doméstico y he llegado a la conclusión de que es una de esas cosas “mejor dejadas a los profesionales”. Tal vez algún día, voy a reunir el valor para tratar de prepararlo.
En los restaurantes chinos de nivel superior, el chef y un asistente llevarán el pato a su mesa y lo cortarán en rebanadas, esculpiendo meticulosamente cada pedazo de piel y carne. A continuación, disfrute de la gran textura de la piel crujiente combinada con la carne siempre húmeda acompañada de un pequeño toque de salsa de frijol dulce, cebollas verdes y trozos de carne, todo envuelto en un panqueque chino al vapor (o, a veces, moño).
Como nota al margen, si alguna vez estás en Beijing (China), donde nació este plato, no se te debería permitir salir de la ciudad sin probar su versión. Un poco diferente de cómo se prepara en los Estados Unidos, pero igualmente sabroso.
