En la geometría euclidiana plana, la regla del coseno es un medio de relacionar las tres longitudes de los lados de cualquier triángulo con uno de los ángulos.
Dado un triángulo ABC, con los lados opuestos a los ángulos que tienen la misma letra, pero en minúsculas, es decir, a, b, c, la ecuación general tiene dos formas (algebraicamente equivalentes):
[math] cos C = (a ^ 2 + b ^ 2 – c ^ 2) / 2 ab [/ math]
[math] c ^ 2 = a ^ 2 + b ^ 2 – 2 ab cos C [/ math]
Estos pueden usarse alrededor del triángulo, en la forma general que C es el ángulo entre los lados a y b, y c es el ángulo opuesto C. Entonces, al rotar las variables a través de las ecuaciones se producirán tres variantes de cada una, cubriendo así todo posibilidades para un triángulo euclidiano general, cerrado, plano.