Principalmente, tamaño y durabilidad. Los hornos comerciales son más grandes y más duraderos. A menudo se construyen con acero y están equipados para manejar un uso intensivo, con características de limpieza más convenientes y una mejor ventilación.
Muchos modelos de horno comercial tienen características adicionales. Por ejemplo, deberían poder calentarse muy rápidamente a altas temperaturas para tiempos de cocción más rápidos y una absorción de calor más completa. Esto permite a los cocineros preparar alimentos de forma segura y más rápidamente de lo que se podría hacer con un horno residencial. Por lo general, también están diseñados para ser eficientes en el consumo de energía. Otras características pueden incluir perillas resistentes al calor, materiales térmicamente eficientes que mantienen el calor, absorbentes de vapor para mantener la textura crujiente de alimentos frescos y forma interior curva.
