Mi esposo me pidió que fuera a la cocina y le hiciera un sándwich. ¿Qué es un buen regreso?

“Claro, estaría más que feliz de hacerlo”.

“Lo haré justo después de que arregles la puerta rota del garaje * que has estado prometiendo arreglar durante las últimas tres semanas”.

* puede ser sustituido por cualquier otra cosa que se rompa en su casa (u otras promesas incumplidas que considere apropiadas)

Veamos:

  1. Ve a la cocina
  2. Hazle un sandwich
  3. Tráelo en un plato
  4. Antes de dárselo, déle un mordisco.
  5. Entonces dale el sándwich.

Él nunca te pedirá que le hagas otro bocadillo otra vez.

Estuve casado 39 años este año y cuando nos casamos por primera vez escuché mucho ‘pero mi madre solía hacer eso’.

Una de ellas era que su madre siempre preparaba su almuerzo para el trabajo. Así que siendo recién casado (y un poco estúpido 🙂) asumí esa tarea. Después de aproximadamente un año, una mañana le pregunté ‘¿qué te gustaría de tu sándwich hoy?

A lo que él respondió ‘oh, todo va a hacer’.

En este punto, me gustaría decir que solía levantarme muy temprano, incluso en mi día libre para hacer su sándwich porque le gustaba recién hecho (¡y su madre lo hizo así!

Así que hice su sándwich debidamente y él lo llevó a trabajar.

Esa noche, cuando llegó a casa, no mencionó el sándwich, pero casualmente anunció que haría sus sándwiches en el futuro.

Nada más fue mencionado.

Así que supongo que un relleno de comida para perros no era “nada” :-)))

La moral de esta historia es hacer su sándwich si lo desea, si no, deje que él haga lo suyo 🙂

Un buen regreso sería ir a la cocina y volver con un sándwich. 🙂