Pros: mañanas agradables y tranquilas. Acceso a todo tipo de productos horneados, todo el tiempo. Descuentos en varios ingredientes (vainilla, nueces, etc.) de vendedores comerciales.
Contras: el público: las personas que se obsesionan con algo y luego se vuelven locas cuando se vendan, personas que asumen que pueden / deben estar abiertas las 24 horas y la expectativa de que todo saldrá del horno al su llegada. Es un trabajo físicamente exigente y todo el lavado (manos, platos, etc.) es duro para tus manos.