Lo has hecho al revés. Él decidirá el precio al que lo vende y cuánto está dispuesto a pagarle.
En realidad, la respuesta depende mucho de dónde radica el riesgo. ¿Cuál es la vida útil de la comida? ¿Retirará las existencias no vendidas, o es su pérdida? ¿Estás ocupando espacio de venta principal? Espacio refrigerado?
¿O se trata de un trato de concesión, donde solo estás ocupando espacio? ¿Quién paga al personal que vende a los clientes?
Dependiendo de todo esto, cualquier cosa entre el 15% y el 60% del precio de venta podría ser correcta.